Reto principal
En 2010, Cammell Laird recibió un contrato de 44 millones de libras para construir dos secciones de 12 metros de altura en las cubiertas central y de popa del HMS Queen Elizabeth, el nuevo portaaviones de 65.000 toneladas construido por la Aircraft Carrier Alliance para la Royal Navy. Debido a la complejidad de la sección del buque, Cammell Laird acudió a Kemppi en busca de soluciones innovadoras para gestionar este gigante proyecto de soldadura.
Solución Kemppi
Además del equipo de soldadura FastMig Synergic 400A (ahora disponible como FastMig X Regular) adecuado para la soldadura MIG/MAG y de varilla (MMA), Kemppi suministró a Cammell Laird varios subalimentadores SuperSnake GT02S , que están diseñados especialmente para manufacturas complejas con un acceso difícil o restringido. Las mangueras de 25 metros de longitud permitían a los soldadores abrirse paso por las escotillas, orificios y huecos hasta sus puestos de trabajo. Así se evitó tener que llevar fuentes de potencia y unidades de alimentación de alambre por todo el barco o gestionar derechos de grúa para ellos cuando trabajaban en cubiertas diferentes, lo que ahorró una enorme cantidad de horas de trabajo y esfuerzo.
Debido a su gran idoneidad para los astilleros, SuperSnake fue bien recibido por los soldadores de Cammell Laird. Con una pistola de soldadura estándar en el extremo de SuperSnake, los soldadores pudieron trabajar en un área mayor que antes sin ningún peso ni sobrecarga adicional. Se describió al equipo como de uso fiable, que permitía un trabajo de soldadura mucho más rápido y económico.